Uno, dos, tres, cuatro, cinco, seis, siete, ocho, noventa más uno se convierte en una nueva palabra.
Uno: diez, dos, fábrica, siete.
Dos: Yu, Qian, Kui, Shang, Tu, Yu, Zi, Gong, Chuan, San, Shi, Zuo.
Tres: Wang, Feng, Tong.
Cuatro: ¿Porque? ,?.
Cinco: Feo.
Seis: Stand.
Siete: Oye.
Ocho: Ji, Wu, Qian, Ya.
Nueve: Pastillas.
Diez: Qian, mil, Yu, veinte, talento, suelo, erudito.
El origen de los caracteres chinos
Los caracteres chinos son uno de los caracteres que más tiempo se han utilizado, son muy utilizados y son utilizados por más personas en el mundo. La creación y aplicación de los caracteres chinos no sólo promovió el desarrollo de la cultura china, sino que también tuvo un profundo impacto en el desarrollo de la cultura mundial. Hace unos 6.000 años, aparecieron más de 50 tipos de símbolos tallados en las ruinas de Banpo y otros lugares.
Son nítidos y estandarizados y tienen las características de caracteres simplificados. Los estudiosos creen que pueden ser la germinación de los caracteres chinos. Los caracteres chinos formaron un sistema de escritura sistemático en la dinastía Shang en el año 16 a.C. La arqueología ha confirmado que a principios de la dinastía Shang, la civilización china se había desarrollado a un nivel muy alto, y una de sus características principales fue la aparición de inscripciones en huesos oraculares. Las inscripciones en huesos de oráculo son escritos antiguos tallados en caparazones de tortugas y huesos de animales. En la dinastía Shang, el rey tenía que hacer adivinación antes de hacer cualquier cosa, y los huesos del oráculo eran la herramienta para la adivinación.
Los oráculos deben tratarse antes de su uso. Primero retire la carne y la sangre de los huesos del oráculo, luego córtelos y alíselos. Luego, utiliza un cortador para perforar una muesca en el interior de la uña o en la parte posterior del hueso del animal. La disposición de estos huecos es ordenada. El adivino o mago grababa su nombre, la fecha de la adivinación y las preguntas que debían hacerse en los huesos del oráculo, y luego quemaba los agujeros en los huesos del oráculo con fuego. Las grietas que aparecen cuando se calientan estas depresiones se denominan "signos".