Hay una tumba frente a la casa en el campo. ¿Deberíamos mover o mover nuestra tumba?
Crecí en una zona rural y pude ver a algunas personas enterrando las tumbas de sus familiares o antepasados no lejos de sus hogares. De hecho, este es un mal hábito. Aunque no soy supersticioso y soy un materialista íntegro, si salgo a ver una tumba por la noche, todavía tendré demasiado miedo para salir, así que trate de no erigir lápidas donde haya gente. Esto no es sólo asunto mío, sino que también concierne a los intereses de todos.
Hay dos razones para mil puntos, la primera es la racionalidad, y la segunda es el altruismo.
La racionalidad de mover la tumba
Si tienes dos opciones ante ti, una es moverte y la otra es mover la tumba. Si puedes elegir a voluntad, te sugiero. que es mejor mover la tumba. Después de todo, el costo de trasladar una tumba es mucho menor que el de mudarse. A diferencia de comprar un cementerio en la ciudad, hay muchas opciones en el campo. La racionalidad de mover tumbas radica en el bajo costo económico, y después de mover las tumbas, podemos visitarlas todos los años sin afectar nuestra capacidad de rendir homenaje a nuestros antepasados fallecidos.
Pero por otro lado, si eliges mudarte debido a tu tumba, mudarte significa comprar una nueva casa. Las casas no son un asunto trivial para la población rural y es probable que supongan una carga para las finanzas familiares. Por tanto, trasladar la tumba es lo ideal.
El altruismo del traslado de tumbas
La presencia de tumbas en zonas residenciales es un motivo de preocupación en sí mismo. No tenemos miedo de inclinarnos ante fantasmas y fantasmas, pero una tumba en el lugar donde todos viven hará que la gente se sienta un poco incómoda, por lo que, por el bien de las personas que nos rodean, debemos mover la tumba. manifestación de la moral pública.