¿Cuáles son los doce signos del zodíaco que Leo no puede conquistar en su vida?
2. Capricornio A los Capricornio les gusta especialmente insertar sus propias opiniones cuando charlan, dejando al león perdido. Además, Capricornio siempre siente que el león tiene algunos secretos que no se pueden ocultar e instintivamente quiere evitarlos. . Los capricornianos ponen toda su mentalidad en la cara y una cosa no puede ser conocida por el mundo. Leo pensará que Capricornio es demasiado superficial y sin sentido. Tanto Leo como Capricornio son muy fuertes y es difícil ganar o perder en una pelea. Este es el momento de dar un paso atrás y abrir el cielo con amor y comprensión.
3. Libra Leo odia el mal, es cálido con quienes ama y desdeña a quienes odia. A veces, Libra sentirá que la inteligencia emocional de Leo es un poco baja. Si un Libra realmente se enamora de alguien, es perfecto. Pero si el león no controla el corazón de Libra, al final resultará herido.
4. Es muy importante lo que dicen o hacen Escorpio y Leo, lo cual es muy importante para Escorpio que es introvertido y está acostumbrado a observar y atacar. Leo puede sentir que Leo es demasiado exagerado o arrogante, y Leo puede sentir que el estilo de diseño de Escorpio es un poco siniestro y cruel. Este es un ensayo muy problemático y realmente prueba el dicho de que "una montaña no puede tolerar dos tigres". ¡La composición de las dos personas es un impacto y un shock de combinación de colores! Para decirlo más directamente, ¡Marte choca contra la Tierra! Escorpio y Leo están ambos delimitados por el paralelo 38 y no pueden ser violados por otros. ¡Son del viejo tipo dominante! Leo es apasionado, enérgico y generoso, mientras que Escorpio es frío y emocionalmente inestable. Siento que el conflicto entre ellos es inevitable y si pueden separarse por completo es una cuestión desconocida. Es probable que Escorpio sea extremadamente celoso durante este período de la relación, mientras que Leo puede parecer frívolo e ingenuo si es moralista. Los Leo suelen ser muy fáciles de perdonar, pero a menudo es demasiado difícil hacerlo bien.