El maestro de la profecía de los seis yao interpreta los hexagramas, la heroína pregunta sobre el amor del cielo y el fuego, y el compañero regresa a su alma.
Ninguna creencia o superstición puede medir el destino de una persona. El destino es muy complicado y no puedes juzgar el estado de tu relación únicamente mediante la adivinación. Por tanto, debemos creer en el pensamiento científico y racional y no ser supersticiosos en la adivinación. Ante los desafíos y dificultades de la vida, debemos buscar activamente soluciones a los problemas en lugar de confiar en predicciones ilusorias o intervenciones sobrenaturales.