¿Qué significan los años ordinarios y los años bisiestos?
Los años bisiestos tienen un 29 de febrero más que los años normales. A este día se le suele llamar "Día bisiesto". A excepción de febrero, los días no cambian en los otros 12 meses. Para establecer las reglas para los años bisiestos, la gente estableció las siguientes reglas: un salto ocurre cada cuatro años, pero no cada cien años, sino cada cuatrocientos años. Por ejemplo, 2000 es año bisiesto, pero 1900 no es año bisiesto porque es un año de siglo (es decir, termina en 00) pero no es un año divisible por 400.
La historia de los años bisiestos se remonta a la antigua Roma, cuando los calendarios se basaban en los ciclos de la luna y el sol. El calendario en ese momento solo tenía 10 meses y un año tenía solo 304 días, que era menos de un año. Posteriormente, para solucionar este problema, el rey romano Julio César siguió el consejo de los astrónomos egipcios y dividió el año en 365 días, más un día bisiesto, es decir, un año bisiesto de 366 días. Esta regulación se ha utilizado hasta el día de hoy y se convirtió en el antepasado del calendario público moderno, también conocido como "calendario gregoriano".