Mi hijo nació el 13 de diciembre de 2012. Pídele al médico que te dé un buen nombre.
Como símbolo literal, un nombre no puede determinar el destino de una persona como dicen algunos adivinos, pero encarna el espíritu de la historia y la cultura. La información de los tiempos y la sociedad hereda. La huella del linaje familiar, encarna el profundo amor y las ardientes expectativas de los padres por sus hijos, e implica diferentes ideales, ambiciones, intereses, pasatiempos y metas, y tiene un impacto enorme y sutil en la vida.