El niño que ayudó a ponerle nombre al niño nació a las 18:22 del primer día de febrero. 50 puntos por un buen nombre
Personalmente, no creo que los nombres mencionados por algunos adivinos determinen la suerte de una persona en la vida. Lo que determina el destino de su vida es su propio carácter, capacidad, entorno social y oportunidades. No podemos cambiar mucho en cuanto al entorno y las oportunidades; el carácter y las habilidades se pueden cultivar, por lo que en lugar de fijar su futuro y destino en el cambio de nombre del adivino, es mejor dedicarse a perfeccionar y mejorar su temperamento y sus habilidades.