El momento y método correcto de regar rosas
Tiempo de riego de las rosas
Durante el proceso de mantenimiento de las flores de las rosas se debe seguir el principio de riego en seco. En circunstancias normales, basta con regar una vez al día. Si la zona tiene un clima húmedo o las temperaturas no son demasiado elevadas se pueden alargar los riegos unos días.
El mejor momento para regar las rosas es antes de las 9 de la mañana. Regar en este momento puede permitir que las raíces absorban bien el agua, por lo que no riegues a altas temperaturas al mediodía.
Tiempo de riego tras el cambio de maceta: Regar la rosa inmediatamente después del cambio de maceta, y regar abundantemente, para que el sistema radicular se integre más con la tierra y la recuperación del crecimiento sea más rápida.
La forma correcta de regar las rosas
Qué agua regar: las rosas se pueden regar con agua de arroz. Diluir el agua de arroz 50 veces con agua y regar las raíces. Úselo una vez cada medio mes y las rosas crecerán vigorosamente y producirán hermosos pétalos.
Cuánta agua regar de una vez: Las rosas necesitan mucha agua, por lo que hay que regar bien la tierra cada vez, en lugar de regar mitad y mitad. Si esto sucede durante mucho tiempo, las raíces de la planta no recibirán suficiente agua y no crecerán bien.
Permeabilidad al agua: Al regar rosas, deben ser permeables al agua, permitiendo que el agua penetre profundamente en las raíces de las plantas, permitiendo que el suelo se humedezca completamente y luego regando nuevamente después del suelo superficial. está seco.
Métodos de riego para el mantenimiento de las flores de rosas en interiores
Las flores de rosas permanecen inactivas en invierno, solo mantenga la tierra húmeda y seca. Si el clima es demasiado seco, puedes rociar agua adecuadamente para mejorar la humedad del aire. Cuando la temperatura sube en verano, riegue dos veces al día para asegurar la humedad adecuada.
Cosas a tener en cuenta al regar flores de rosas
1. Controlar el agua en invierno: las hojas de las rosas se caerán en invierno y no consumirán mucha agua. Siempre que mantengas una cierta humedad y no te seques por completo, podrás sobrevivir con éxito al invierno. Por tanto, en invierno, las rosas se pueden regar una vez cada medio mes. A la hora de regar, lo mejor es regar lentamente por el borde de la maceta.
2. Riego en verano: Además de una adecuada sombra, también conviene prestar atención a una adecuada pulverización de agua para crear un ambiente húmedo, que pueda favorecer el crecimiento de las hojas de las rosas. Tenga en cuenta que la tierra de la maceta no debe estar demasiado húmeda ni demasiado seca. Demasiado seca dañará las raíces y las hojas, y demasiado seca hará que las ramas y las hojas se marchiten.
3. Riego excesivo: si las rosas se riegan demasiado, son propensas a pudrirse las raíces. Es necesario trasladarlas al sol a tiempo o colocarlas en un lugar ventilado para acelerar la pérdida de agua.