¿A qué debes prestar atención al copiar las Escrituras? ¿Qué debemos hacer con las Escrituras copiadas?
1. Lávese las manos antes de copiar las Escrituras y elija un lugar limpio. La mesa donde se colocan las Escrituras debe limpiarse con un paño y es mejor cubrirla con un mantel limpio. Al copiar las Escrituras, el papel blanco adjunto a las Escrituras debe colocarse debajo de ambas manos para evitar que las manchas de sudor manchen las Escrituras.
2. Antes de copiar la Biblia, por favor ora desde el fondo de tu corazón para que cada ser vivo pueda deshacerse de todo el dolor que sentirá ahora y en el futuro y obtener la felicidad eterna. Rezo para que se eliminen los desastres, no ocurran desastres, la gente sea amable, saludable y feliz.
3. Al copiar las Escrituras, asegúrese de centrarse en la descripción con respeto. Haz tu mejor esfuerzo para hacer un dibujo en tus manos, observa las palabras con tus ojos, dibuja con tus manos y dibuja con tu corazón, para que puedas aprender de ello y ganar sabiduría durante mucho tiempo. No seas codicioso por más y escribe y copia al azar. Si tienes demasiados pensamientos delirantes, puedes detener una o varias palabras y, cuando lo hagas, recitar Buda o un mantra para capturar tu mente. Es bastante efectivo.
2. Métodos de tratamiento:
1. No quemar escrituras copiadas. Puedes atarlo tú mismo y conservarlo tú mismo. Al guardarlo, se puede colocar encima de la estantería o junto con las Escrituras (debajo de las Escrituras).
2. Puedes donar al templo. Cuando vas a un templo, primero debes ofrecer incienso y luego pedírselo al monje. El templo normalmente lo aceptará.
Datos ampliados:
Otra introducción relacionada:
Copiar las Escrituras no es adecuado para nadie, como aquellos que están molestos y no pueden calmarse, y no están Personas lo suficientemente piadosas o respetuosas que leen las Escrituras, personas que garabatean y copian sin corregir sus errores, personas que son impacientes e incapaces de perseverar o incluso darse por vencidos a mitad de camino. Estas personas no son aptas para copiar las Escrituras.
Lo más importante a la hora de copiar clásicos es perseverar, no rendirse a mitad de camino y cultivar la diligencia a largo plazo. Copiar las Escrituras no significa escribir a máquina o garabatear. Debes ser decidido, decidido y preciso en cada frase. Asegúrese de no cometer errores tipográficos, omisiones o duplicaciones.