Hay tumbas alrededor de la casa, ¿vale?
Creo que sería malo para las personas que viven en la casa si hubiera tumbas alrededor de nuestra casa. La existencia de tumbas no sólo nos da miedo muchas veces, sino que se considera una situación muy mala.
Así que, ya sea que estemos construyendo una casa o eligiendo un cementerio, intentaremos mantenernos alejados de la casa. Por supuesto, esto no es algo absoluto. En concreto, si es bueno o no hay que analizarlo en función de las siguientes situaciones.
En primer lugar, la tumba no tiene nada que ver con la familia. Si hay tumbas alrededor de nuestra casa, no tiene nada que ver con nuestra casa. En este caso, se considera una mala existencia.
La existencia de estas tumbas puede resultar aterradora; especialmente para las mujeres y los niños en el hogar, quienes naturalmente temen las tumbas de sus antepasados.
Además, los miembros de la familia se sentirán desafortunados si miran estas tumbas todo el día; esto les producirá algunas emociones desagradables, lo que no favorecerá la armonía de la familia a largo plazo.
En segundo lugar, las tumbas son los antepasados fallecidos de la familia. Muchas veces enterramos a nuestros familiares fallecidos cerca de nuestras casas. Por un lado, aquí hay buenas tumbas y, por otro, nos conviene adorar entre semana.
En este caso, creo que la mayoría de la gente no pensaría que hay nada malo en la existencia de estas tumbas. Porque inconscientemente sabemos que este es nuestro hogar. Para nosotros sólo hay ventajas y no desventajas.
Así que tener tumbas alrededor de la casa en la que vivimos no es necesariamente algo bueno. Estas tumbas no sólo asustan a la gente sino que también les hacen sentir mala suerte con su hogar.