¿Cuáles son las tres constelaciones de decir adiós al pasado, dejar atrás las obsesiones y empezar de nuevo?
Tauro Para Tauro es completamente imposible olvidar el pasado. A menos que pierda la memoria y que otros utilicen fisioterapia con ella, nunca olvidará estas cosas que no quiere olvidar. La duración es realmente algo bueno. Con el tiempo, su dolor puede disminuir y su tristeza puede no ser tan dominante, pero eso no significa que no le resultará difícil. La duración del tiempo nunca puede igualarse. Para Tauro, el tiempo no hará más que acentuar sus recuerdos y sus sentimientos. Podía pensar en nada y fingir que no pasó nada, pero no fue por el tiempo que lo olvidó o finalmente lo descubrió. Simplemente no quería que otras personas que la amaban se preocuparan.
Géminis puede entristecer a Géminis, no porque sea descuidado, sino porque elige olvidar. A los ojos de Géminis, si hay algunos problemas que realmente no importan, pero que realmente no entienden, simplemente se sentarán y esperarán, y luego volverán a vivir sus propias vidas. Después de todo, cada día le venían a la mente muchas preguntas diferentes, pero no podía detenerlas y decidió ignorarlas. Cuando se enfrenta a problemas emocionales, Géminis también implementa inconscientemente este método. De repente no tenía forma de retener a la otra parte, de repente no tenía forma de controlar el rápido desarrollo de la situación, por lo que no podía fingir que no pasó nada. A Géminis no le gusta avergonzarse, pero tampoco le gusta verse inmerso en el dolor todos los días. No puede elegir abandonar el otro lado, pero puede elegir cómo vivir de nuevo.
Cáncer es una arpía reconfortante, y nunca obligará a los demás a hacer nada en ningún momento. A menos que otros lo prescriban, sin duda está ayudando a otros según sus creencias. Esto es especialmente cierto en el caso de Cáncer, que no tiene idea de su relación con la otra persona. Hubo palabras claras entre ambos y no hubo acciones personales establecidas. Lo único seguro es que deben ser diferentes a los demás. Cuando llega la otra parte, Cáncer no está preparado. Cuando la otra persona se marcha, Cáncer todavía no está preparado de antemano. De principio a fin, Cáncer en realidad acepta pasivamente frente a la otra parte. Nunca ha pensado en torcer esta aceptación pasiva, ni quiere torcerla, porque los demás se han convertido en el pasado y en las personas del pasado para él.