Soñé que mi marido y yo estábamos haciendo albóndigas.
Será mejor que seas lanzador de relevo y esposa estos dos días. Aunque no hay luz al frente, brilla el temperamento gentil y considerado. Cuidar especialmente a los grupos vulnerables y escuchar las quejas de los demás. Su posición en la mente de todos también es digna de respeto. Además, es mejor devolver lo que pide prestado a otros lo antes posible y no permitir que el incumplimiento afecte su suerte.
Soñé que mi marido y yo estábamos haciendo albóndigas.
La base es sólida y estable, pero se respira talento. Si cambia su perspectiva y usa su sabiduría con flexibilidad, puede lograr un éxito temporal. Sin embargo, debido a la mala configuración del éxito, es difícil extenderlo y hay signos de éxito y esperanza tardíos. Tenga cuidado con los daños causados por la tierra, las rocas y los equipos en el tráfico.