Hay 800 millones de kilogramos de pescado en el lago sagrado del Tíbet. ¿Por qué nadie se ha atrevido todavía a pescar?
Lago Sagrado
Primero, el Lago Sagrado puede dar a las personas paz interior y purificación y no puede destruir su santidad. Se dice que existe una especie de voluntad de Buda que dice que cuando los practicantes caminan alrededor del lago, pueden obtener méritos inconmensurables y abandonar los malos hábitos y el sufrimiento. La cultivación misma requiere un corazón puro y puro. Si el equilibrio de un practicante se rompe, no es sólo la relación entre las personas y los seres vivos, sino también un desafío al resultado final y al corazón protector de las personas.
Creer
En segundo lugar, por costumbres y hábitos, el pez en el lago santo es una especie de sustento y una misión. Los tibetanos creyentes en el budismo tienen la característica de no matar animales. El pez representa la vida y no se puede cruzar. Además, los tibetanos tienen la costumbre tradicional de enterrarlos en el agua. Los peces, como criaturas acuáticas, conectan hasta cierto punto la vida y la muerte. Esto demuestra que el pueblo tibetano siente reverencia por la vida.
Los peces
El suelo y el agua sustentan a una persona, y la mayor amistad que brindamos a los demás es el respeto. En esta tierra que amamos, respetar y mantener los hábitos y costumbres de los demás y asombrarnos de la voluntad divina son nuestras mayores bondades. Para los peces, decorar el mundo en un lugar hermoso nos hace sentir otro tipo de vitalidad y vitalidad, por lo que no es un tipo de belleza.