El trabajo de inspección diario de Xin Siyue muestra que en los días de viento, los pozos de agua y viento están llenos de animales pequeños.
Nosotros lo llamamos aura y los extranjeros lo llaman campo magnético. ¿Cuál es la verdad? La situación cambia según tu corazón. Donde vive gente sincera, pura y compasiva, el entorno cambiará naturalmente. Esta es la llamada "tierra bendita, tierra bendita y pueblo bendito". Una persona sin felicidad no puede vivir en una tierra bendita. Incluso si sobreviven, la tierra bendita cambiará gradualmente. Se puede ver que el Feng Shui no es fijo, sino que cambia a voluntad. Los llamados "cambios ambientales a voluntad". Por lo tanto, los guías budistas no deben prestar atención al entorno de vida, sino que deben centrarse en el corazón. Si tu corazón es bueno, tu amante es bueno, tu cuerpo es bueno, tu entorno de vida debe ser bueno, lo que dijo el Buda es verdad. Pensamos detenidamente y gradualmente nos damos cuenta de este principio y verdad, y luego estamos dispuestos a aceptarlo y seguir las enseñanzas. Si eres de buen corazón, cualquier ambiente será bueno para ti; si el Bodhisattva Ksitigarbha es de buen corazón, vivir en el infierno es un lugar bendito.
Todo en el universo tiene sus consecuencias, por eso todo es relativo. Si el corazón está bien, entonces el Dharma está por delante; por otro lado, los espíritus malignos crean magia.
Si podemos seguir las enseñanzas del Buda y practicar las Diez Virtudes, no seremos codiciosos, resentidos, ignorantes, abusivos, mentirosos, sembradores de discordia, charlatanerías, matadores, robadores o relaciones impropias. entre hombres y mujeres.
Si sigues el karma y dejas que tu carácter y tu temperamento hagan su trabajo, es mágico.
Si puedes controlar tus emociones, puedes "seguir tu corazón" en lugar de "seguir tu corazón" como hace la mayoría de las personas.
Así que hay un dicho en el Zen: "Cada día es un buen día". Se puede decir: "Cada día es un buen día". Se llama: “Cada día es el cumpleaños de Buda. Eso es lo que significa.
Entonces, aquellos a quienes no se les permite hacer cosas buscan bendiciones para sí mismos y regresan al mundo.
Es decir, cuando encuentre contratiempos, no culpe a los demás, pero primero descubra el meollo del problema dentro de usted mismo y trate de corregirlo. Si sus palabras y acciones son correctas, todos lo respetarán mucho y todo irá bien.