El que primero diga buenas noches, gana.
Cuando dos personas se preocupan y se dan las buenas noches, significa que esperan que el otro pueda pasar una noche tranquila y hermosa y esperan volver a encontrarse mañana. Se trata de un intercambio de afecto y cuidado, no de competencia.
Por lo tanto, no importa quién dé las buenas noches primero, lo más importante es cuidarse y amarse unos a otros.