¿Cuál es la mentalidad de esos hombres a los que les gusta recompensar a las presentadoras en la sala de transmisión en vivo?
Una vez vi a un niño así, de unos dieciocho o diecinueve años. Le gusta ver transmisiones en vivo y gasta mucho dinero para recompensar a las presentadoras. Ese día, accidentalmente lo vi viendo la transmisión en vivo en la computadora. En la imagen, una chica con mucho maquillaje frunció el ceño, como si no estuviera contenta.
Vi al niño sacar su teléfono móvil y empezar a buscar regalos, cohetes, coches deportivos y un montón de cosas. Vi a la niña sonriendo y diciendo algo así como "gracias hermanito, gracias rico".
También tengo curiosidad, ¿es necesario pagar tanto dinero por una mujer invisible e intangible? Le pregunté al respecto más tarde y me dijo que allí puedes encontrar cierta confianza que no puedes encontrar en la vida real. Abandonó la escuela y empezó a trabajar. La fábrica lo acosaba cuando era niño por su inexperiencia y nadie lo reconocía. Pero el presentador femenino lo llamará dios masculino y estará de acuerdo con él sin importar lo que haga, dándole satisfacción espiritual.
En primer lugar, lo cierto es que esta persona es muy irracional. Preferiría comer fideos instantáneos que gastar dinero para recompensar al ancla. Este comportamiento es indeseable. No llama la atención en la vida real, pero de esta manera busca consuelo en Internet. Después de cada recompensa, los presentadores te dirán sinceramente que satisfagas su vanidad. Esta mentalidad es inaceptable y hay que ser responsable. No puedes pensar en tu propio sustento sólo porque estás feliz por el momento.
En resumen, puede haber muchas otras razones por las que a los hombres les gusta recompensar a las presentadoras, pero no podemos juzgar si este comportamiento es bueno o malo. Después de todo, cada uno tiene diferentes maneras de satisfacer el disfrute espiritual.