El origen y fundador del taoísmo
El taoísmo es una antigua religión china que se formó a través de un desarrollo histórico a largo plazo de acuerdo con su propia lógica interna. El taoísmo es la religión nativa de China. Los antepasados chinos adoraban la naturaleza, los fantasmas y los dioses, y prevalecía la adivinación para comunicar los deseos de los humanos y los dioses. Esta religión primitiva evolucionó gradualmente hacia la adoración del cielo o de los dioses y la adoración de los antepasados durante las dinastías Yin y Zhou.
Las principales enseñanzas del taoísmo
1. Respetar el Tao y ser virtuoso. "Tao" es el núcleo de la creencia taoísta.
El taoísmo considera el Tao como la creencia más elevada, considera el Tao Te Ching como un clásico y respeta el Tao y la virtud. Se cree que el Tao es el origen de todas las cosas en el mundo y que el universo, el yin y el yang y todos los fenómenos son creados por el Tao. La virtud es "adquisición" y el Tao está encarnado en las personas y en todas las cosas. Las personas y todas las cosas nacen del Tao y de la educación moral, por eso debemos respetar el Tao como virtud.
2. La inmortalidad es el objetivo de la práctica taoísta.
El taoísmo cree que el taoísmo se puede cultivar y la inmortalidad se puede lograr a través del taoísmo. El taoísmo considera que la vida es extremadamente importante y la cultivación significa inmortalidad. Aboga por extender la duración de la vida y mejorar la calidad de vida a través de la cultivación, logrando así la eternidad en la vida. El taoísmo aboga por tratar la vida secular con una actitud pura e inactiva, practicar con el espíritu de "mi vida está en mi ausencia" y volverse uno con el taoísmo a través de diversas prácticas taoístas para convertirse en inmortal.