¿Hay alguna recompensa por pescar?
Los peces, por grandes o pequeños que sean, tienen conciencia y dolor. Enganchamos el pescado, le quitamos las escamas, le quitamos las vísceras o lo cortamos en varios trozos, luego lo freímos en la olla y luego lo cocemos a fuego lento en la sopa. Una vez completados estos procedimientos, podrá disfrutar de su comida.
¿Te has preguntado alguna vez cómo se siente el pescado cuando satisfacemos nuestro apetito? ¿Te lastimaron a ti o a ti? ¿Por qué deberías llevarme y soportar el dolor de dieciocho niveles del infierno? Especialmente los peces con huevos en el estómago. Si se daña una vida, se dañan decenas de miles de vidas. Qué graves son las consecuencias.
¿Por qué el mundo no abandona estos comportamientos? Una es porque no es ilegal. A los ojos de la mayoría de las personas, la pesca es una actividad recreativa muy agradable y todos deberíamos haber tenido experiencia en pesca. Es divertido y no está prohibido por ley, por lo que nadie quiere dejarlo. El segundo es no conocer causa y efecto y no juzgarse a uno mismo ni a los demás. Muchas personas no creen en el budismo, no conocen el karma y ni siquiera piensan que son peces. De hecho, pensemos en ello. Si nos convertimos en pescado, nos cortarán en pedazos, nos romperán los huesos y nos acalambrarán, nos freirán y hervirán, y no podremos soportarlo. En tercer lugar, la compasión no es innata, es egoísta y carece de práctica.
Te aconsejo que no comas carpa cruciana en marzo, ya que hay miles de peces en tu estómago. Te aconsejo que no mates a los tres pájaros primaverales. Tu hijo se quedará en el nido esperando a que regrese su madre. El amor es un guardián compasivo al que es difícil dejar de lado. Debemos abandonar la mentalidad centrada en las personas y vivir en paz con todos los seres sintientes del mundo. No sólo debemos dejar de pescar, sino que debemos liberarlos cuando tengamos la oportunidad de aumentar las bendiciones para nosotros y nuestras familias, y eliminar algo de karma. y crear algunas buenas obras.