¿El jazmín perfumado es adecuado para cultivar en interior? ¿Es bueno tener jazmines perfumados en casa?
Las flores del perfume de jazmín son blancas, que pertenece al oro en los cinco elementos, y tiene el efecto feng shui de ganar dinero. Por lo tanto, cultivar plantas en casa puede aumentar la riqueza del hogar y también eliminar la turbidez del hogar.
¿Se puede colocar perfume de jazmín en interiores?
El perfume de Jazmín es más adecuado para el cultivo en interior. Sin embargo, no se recomienda tenerla en interior, especialmente durante el periodo de floración, porque requiere mucha luz y una mala iluminación interior puede afectar a la floración.
Pros y contras del perfume de jazmín de interior
1. Beneficios
El aceite volátil producido por el perfume de jazmín de interior tiene un efecto bactericida y puede matar eficazmente los gérmenes de interior. Además, cuando florezca, irá acompañada de ráfagas de fragancia que pueden hacer que las personas se sientan relajadas y felices.
2. Desventajas
La planta del jazmín perfumado es venenosa, por lo que es mejor no tocar sus ramas durante el mantenimiento. Y el olor a flores puede provocar molestias con el tiempo.
Cómo cultivar jazmín perfumado en interior
1. Tierra
El jazmín, una especie de perfume, le gusta la tierra suave y transpirable. La tierra de jardín, la arena de río y la perlita se pueden mezclar uniformemente en una proporción de 6:3:1 como tierra de cultivo.
2. Temperatura
Al perfume de jazmín le gustan los ambientes cálidos, y la temperatura debe controlarse entre 18 y 28 grados centígrados. Cuando hace demasiado calor, lo mejor es mantener las plantas en un lugar fresco y ventilado.
3. Equipo de iluminación
Al perfume de jazmín le gusta la luz, por lo que las plantas deben mantenerse en el interior, en un balcón o ventanal con buena iluminación. Cuando la luz sea demasiado fuerte, tenga cuidado de dar sombra a las plantas para evitar quemar las hojas y las flores.
Riego
Al jazmín perfumado le gustan los ambientes húmedos, por lo que el riego debe realizarse tanto en húmedo como en seco para evitar regar en exceso y no secar demasiado, lo que puede provocar congestión en las raíces. Cada vez que riegues, espera hasta que la superficie esté seca antes de volver a regar.