¿Será que solo trabajo y vivo?
Muchas veces es tu elección.
Si eliges trabajar, estás trabajando.
Está vendiendo tortitas. Él es el jefe.
No, tu propio destino está en tus propias manos. Aún tienes que controlarlo tú mismo. Hay que actuar, no fantasear, sólo con un esfuerzo continuo se puede triunfar. Sea realista y no corra demasiados riesgos. Aunque hay casos de éxito desesperado, la realidad es cruel. Debes estar preparado para avanzar o retroceder y no puedes dejar tu destino enteramente en manos de otros. Descubrirás que cuanto más fallas, menos ayuda recibirás, por lo que podrás comer unos cuantos tazones de arroz, controlarte y empezar poco a poco.