Mis padres se han ido.
Es alto, trabajador y responsable.
Yo también tengo una madre que me quiere.
Ella es gentil y virtuosa y me protege.
Fueron novios desde la infancia. A la edad de 10 años, estaban destinados a estar juntos toda la vida.
Después de cenar me cogerán de la mano y saldrán a caminar.
Cuando trabajamos juntos, me ponemos al borde de la cancha.
Recuerda que cuando iba al mercado,
Papá me llevaba en hombros, lo cual me enorgullecía mucho.
Mi madre me mira con ternura de vez en cuando y me hace feliz.
¡Pero un día, mi padre desapareció de repente!
¡Dos años después, mi madre falleció!
¡De repente no tengo padres!
Soy demasiado traviesa. ¿me quieres?
Me desperté en medio de la noche tres veces y mi madre me abrazó y lloró durante mucho tiempo.
¡Pero al día siguiente, mi padrastro me envió de regreso a la casa de mi tío!
Me dio una fuerte palmada en la espalda con una larga caña de bambú.
Agarró un bambú afilado y me lo clavó en la cara y en las palmas.
Mis ojos, ¿por qué mis ojos están todos negros?
Me duele. Mis ojos y mis manos no podían distinguir si era sangre o lágrimas.
¡Los sonidos que escucho son cada vez más pequeños!
Sopló una ráfaga de viento frío, me acurruqué y me estremecí.
¡Quiero dormir!
¡Sin frío ni dolor al dormir!
¡Dormiré bien!
Quiero ir a ese lugar donde no hay dolor,
¡El lugar donde mamá y papá no me dejarán!
¡Buenas noches! ¡adiós! este mundo.