Lenguaje de la estrella de los deseos: un signo que es muy posesivo y quiere controlar todo acerca de su amante, lo que deja a la gente sin aliento.
Constelación de Leo
Leo es un rey nato, necesita orgullo y autoestima, pero es demasiado dominante. Una vez que aman profundamente a alguien, deben considerar a la persona que aman como propia. Esto es comprensible. Pero la posesividad hace que las personas tengan que controlar todos los aspectos de la persona que aman, lo cual es insoportable, no sólo los asuntos triviales de la vida, sino también la comunicación entre amigos. ¿Qué tipo de sexo opuesto es inaccesible? Averigüemoslo por género. Cuando están en una relación, necesitan supervisar cada aspecto del otro.
Palacio de Virgo
Los Virgo persiguen la perfección en el amor y la lealtad absoluta hacia su amante, lo que exige tanto de la otra persona como de ellos mismos. Creen que amar significa tenerlo todo. Tienen una fuerte creencia en la muerte y son muy posesivos. En una relación, tienen absolutamente el control de todo y no dejarán pasar ningún detalle. Su amor es realmente muy duro. Si podemos comprenderlos y trabajar juntos por el amor perfecto, esta puede ser una felicidad que otros no pueden experimentar.
Constelación de Cáncer
Las personas Cáncer lo dan todo por amor, pero mueren sólo por amor. Debido a esto, desean amar a los demás de todo corazón, lo cual es verdadera posesividad. Su posesividad es ligeramente diferente a la de la gente común y se puede dividir en dos aspectos. Por un lado, desean poseer completamente a su amante y, por otro, desean dedicarse a su amante y ser completamente poseídos por la otra persona. Lo que más necesitan es armonía. Si dos personas Cáncer están juntas, será maravilloso.
Debido a que la posesividad es un deseo, debe controlarse, no complacerse. Esto hará que las personas se vuelvan locas y sientan que se ha violado su necesaria dignidad. Si aman bien, cambiarán su naturaleza o incluso romperán, lo cual no es bueno. En el amor todo debe basarse en el amor verdadero. El respeto y la tolerancia son mucho mejores que la posesión.