Los capullos de gardenia no florecieron y todos cayeron. ¿Cuál es la razón?
1. Demasiada agua
A las gardenias les gusta un ambiente húmedo, y suficiente agua puede promover el crecimiento continuo de las gardenias. Durante el período de floración de la gardenia, los botones florales comienzan a crecer y es necesario controlar el riego. El riego excesivo provocará la acumulación de agua, lo que provocará la pudrición de la raíz de la gardenia y la caída de los botones florales. Espere hasta que la tierra esté seca antes de regar. Riegue abundantemente.
2. Iluminación insuficiente
A Gardenia le gusta tener suficiente luz, lo que favorecerá la floración de los pétalos. Si las gardenias se mantienen en un lugar oscuro y húmedo durante mucho tiempo, la luz insuficiente hará que falle la fotosíntesis de las hojas de la gardenia, lo que provocará que los botones florales se marchiten y se caigan. Guarde las gardenias en un lugar ventilado y luminoso para asegurar que la luz del sol promueva el crecimiento y la floración de las gardenias.
3. Fertilización insuficiente
La gardenia necesita suficientes nutrientes. Se requiere fertilización durante el período de crecimiento de la gardenia para proporcionar suplementos nutricionales y promover el crecimiento de la gardenia. Una nutrición insuficiente hace que las gardenias crezcan lentamente y sus botones florales se caigan. Durante el período de floración de la gardenia, se puede aplicar fósforo, potasa y una pequeña cantidad de fertilizante nitrogenado para promover el crecimiento de las flores y hojas de la gardenia.
4. La temperatura es demasiado alta
A Gardenia le gustan los ambientes cálidos y la temperatura de crecimiento adecuada es entre 15 y 25 ℃. Si la temperatura es demasiado alta, las gardenias dejarán de crecer y sus botones florales se caerán. Mantenga las gardenias en un lugar ventilado para mejorar la circulación del aire. Cuando el ambiente esté seco, se puede rociar agua en el aire y en la superficie de las hojas para enfriarlas e hidratarlas.