¿Quién ha visto el tema musical de una serie de televisión? Esta es "Ordinary Song" de Li Zongsheng, protagonizada por Liu Songren y Ye Tong.
Filmada en 1991
Actores principales:
Ye Tong interpreta a Yue Ying y Liu Songren interpreta a Tian Yang.
Shen Mengsheng interpreta a Hong Yuxuan y Lin Xiuling interpreta a Ye Rumei.
Jiang Ming interpreta a Yue Cunzong y Shen Xuezhen interpreta a Yue Rong.
Zhang Yuyan interpreta a Lin Yue y Zhong Yan interpreta a Hong Kun.
Interpretado por: Hong Pingjun interpretado por: Ding Wenchang.
Qian interpreta el papel de Yu.
Ma interpreta a Yin y a Shi Yonggui.
Wang Yu interpreta: El tío Fang.
Introducción:
Uno es hijo del famoso, talentoso y heroico Gui Jie; el otro es un joven tímido que carece de educación y está acostumbrado a jugar a los hooligans desde que era. un niño. Parecen no tener nada que ver el uno con el otro, pero sus destinos están conectados gracias a la intervención de una chica noble. Al final, el joven poco prometedor de una familia pobre logró monopolizar el macizo de flores y conquistar el corazón de una chica famosa. ¿Por qué no? Sólo porque tiene un corazón más bondadoso que ese noble hijo.
A finales de la dinastía Ming, los ladrones de caballos abundaban en Shandong y la seguridad pública no era pacífica. Yue Ying, la hija menor de Yue Cunzong, el Ministro de Asuntos Domésticos, viajó a Shandong con su padre cuando era joven. Desafortunadamente, es capturada por un ladrón de caballos que quiere extorsionar a su padre. Cuando Yue Ying entró en pánico, gracias a la ayuda de Luo Tianyang, surgió un pequeño grupo de ladrones de caballos. Resulta que Tianyang fue una vez prisionero de un ladrón de caballos. Estuvo separado de su familia desde que era un niño y su experiencia de vida es un misterio. Tianyang simpatizaba mucho con Yue Ying y finalmente se arriesgó para ayudar a Yue Ying a escapar de la cueva de los ladrones.
Como adulta, Yue Ying ha estado obsesionada con este salvador de la infancia. Una vez conoció a un adivino que le dijo que estaba destinada a casarse con un ladrón. Por un lado, lo denunció como superstición, pero por otro, cayó irresistiblemente en la teoría del destino, lo que desencadenó una serie de historias relajadas, trepidantes y románticas.