¿Disculpe, Maestro? ¿La Internet global está conectada mediante cables de red?
El primer cable submarino en el Océano Pacífico fue tendido por el Reino Unido en 1902, y Estados Unidos también tendió un cable submarino en el Pacífico en 1905. Actualmente, existen cables submarinos entre Canadá y Australia, Estados Unidos y Filipinas, Japón e Indonesia, Hong Kong y Filipinas y Vietnam, y países costeros de América del Sur. En los últimos años se han utilizado satélites de comunicaciones artificiales para las comunicaciones sobre el Océano Pacífico.
El primer cable óptico submarino transatlántico del mundo se puso en funcionamiento a finales de 1988. Este dragón submarino conecta Estados Unidos, Gran Bretaña y Francia, con una longitud total de unos 6.400 kilómetros, 7.650 líneas de comunicación y 40.000 líneas telefónicas conectadas al mismo tiempo. En 1993, se implementó un proyecto transcontinental a gran escala para conectar Asia, Europa y África con una red de comunicación de fibra óptica, que puede conectar 12 países y regiones en tres continentes. Este cable óptico, denominado "Línea Global de Comunicaciones Ópticas", parte de las Islas Británicas y se extiende hasta medio camino hasta el Océano Pacífico, conectando España, Italia, Egipto, Emiratos Árabes Unidos, India, Tailandia, Malasia, China y Corea del Sur. Esta línea de comunicación de fibra óptica es actualmente el sistema de comunicación de fibra óptica más grande del mundo, que puede transmitir centrales telefónicas, programas de televisión y datos informáticos en Asia a África y Europa en tiempo real. Al mismo tiempo, la información de Europa y África se enviará a Asia a tiempo. Para satisfacer las necesidades de los servicios de voz e imágenes de Internet y las futuras autopistas de la información, se está tendiendo una línea de comunicación de fibra óptica transoceánica y transcontinental que conectará a 175 países de todo el mundo. El proyecto de comunicación más magnífico del siglo XX, se extiende por el Océano Atlántico, el Mar Mediterráneo, el Mar Rojo y el Océano Índico, cruza el Estrecho de Malaca hacia el Océano Pacífico y finalmente cruza el Océano Pacífico para conectarse con América del Norte. La longitud total es de casi 320.000 kilómetros, lo que equivale a 8 vueltas alrededor del ecuador terrestre. Se espera que este gigante de las comunicaciones ópticas despegue a principios del siglo XXI.