¿Cómo protegerte cuando un mafioso te roba?
Cuando te asalten, mantén la calma y trata de ser racional. Al final, sólo podrás salvarte tú mismo en este momento. No entre en pánico ni grite. Esto irritará al gángster y le hará perder la paciencia. Quizás te maten para callarte. Por lo tanto, no lo aborde apresuradamente.
Cuando te roban, debes tratar a los delincuentes violentos con tacto y hablar con ellos. No tengas demasiado miedo. La mayoría de los delincuentes están motivados por el dinero, por lo que recordar las características de los ladrones, como heridas, voz, altura, apariencia, vestimenta, pertenencias, etc., es de más ayuda para la policía.
Al ser asaltado, después de tu propio análisis tranquilo, si te aseguras de que tu fuerza es mayor que la de tu oponente, podrás realizar la resistencia adecuada. Por ejemplo, si el oponente no está prestando atención, lo mejor es contraatacar rápidamente. Si el gángster no está prestando atención, puedo deshacerme de él rápidamente después de contraatacar. Preste atención a evaluar con precisión sus propias fortalezas y las de la otra parte. Si eres mujer, trata de no contraatacar y trata de usar la sabiduría.
Cuando te roban, no puedes dar tu vida por dinero. En este momento, está bien perder un poco de dinero. Comprenda que los ladrones harán cualquier cosa por dinero, así que no se lo tome demasiado en serio. Después de todo, sólo se vive una vez. El dinero se acabó, pero aún puedes recuperarlo.
En caso de robo, debes analizar claramente tu posición. Si el gángster definitivamente quiere dinero y no hay efectivo, debes ir a casa y conseguirlo. Aprovecha la oportunidad y llévalo a lugares concurridos, como plazas y mercados, para escapar rápidamente y buscar ayuda para garantizar su propia seguridad.
Si no eres atacado por mafiosos, deberás protegerte según la situación. Si te encuentras con un criminal que empuña un cuchillo, mantén una cierta distancia y busca oportunidades para darte la vuelta y huir o usar tus pies para agarrar el cuchillo. Si tu oponente ataca por detrás, puedes usar los codos o las piernas para atacar la cabeza y el abdomen del oponente. Por supuesto, lo más importante es anteponer tu propia seguridad y no ser demasiado impulsivo.